Las mujeres practicamos el romance de la amistad. Nos mandamos mensajes de buenas noches, y de ánimos. Preguntamos: ¿Cómo estás hoy? o ¿Cómo te ha ido el trabajo?
Nos arreglamos para vernos, y quedamos en lugares bellos. Quedamos a solas; valoramos la intimidad. "Te recojo del trabajo" o "que duermas bien" son mensajes de amor que nos mandamos.
Conocemos nuestros secretos sin juzgar. Nos besamos y abrazamos. Preparamos con mimo sorpresas, regalos, y cenas de bienvenida. Hacemos collages con fotos y discos de recopilación. Lloramos y reímos, nos señalamos las cualidades y damos los consejos con cariño.
Nos decimos piropos, nos admiramos, nos inspiramos; nos acompañamos. Nos escuchamos con profundidad. Nos llamamos. Nos regalamos artesanías y sanamos juntas. Hacemos arte.
Nos decimos "gracias", "lo siento", "me siento afortunada de tenerte en mi vida", "te quiero".